09 diciembre 2011

más y menos mal

Coinciden en El País 7.12 cómo el exvicepresidente ejecutivo de Olimpus y un exauditor externo elaboraron en 1998 un plan junto a varios bancos de inversión para ocultar lo que, en los siguientes trece años, serían 1.294 millones de euros de pérdidas solo ahora reveladas. Y a partir de las ruinas de Lehman Brothers, cómo las investigaciones en Estados Unidos “están teniendo muy difícil probar que las Agencias de calificación de riesgos cometieron alguna irresponsabilidad al poner nota a las hipotecas basuras”. Mientras lo primero no puede, a estas alturas, sorprender a nadie, lo segundo es un alivio en estos días en que esas mismas agencias amenazan la calificación crediticia de la deuda pública en 15 de los 17 los países de la zona euro. Alivia que no sea por intereses ocultos, por usura o corrupción generalizada, que los encargados de validar o no la calidad de un activo financiero fallen al calificar con la máxima solvencia los activos hipotecarios que conducirían al comienzo de la crisis económica actual en 2007. Alivia saber que es solo ineptitud, clásico ejemplo de gente haciendo justo aquello que no deberían estar haciendo. Ese otro baldón de su fiabilidad: cómo avalaran en su día las cuentas de Enron, gruyere contable que acaso los dirigentes de Olimpus solo tuvieron que estudiar para saberse aún con una década de tranquilidad por delante. 

2 comentarios:

A.Pérez dijo...

a los de las agencias de calificación habría que...

: /

hace tiempo - dos años creo - que Olympus además publicó que ya no fabricaría más cámaras compactas ...
lo verían venir...¿?

uliseos dijo...

bueno, una contabilidad b es justo eso... una contabilidad compacta... casi invisible :P