28 abril 2012

an education




Cuanto más sufre Carey Mulligan, mejor es la película. Solo por eso estremece ver que la lentitud con que, respectivamente en An education, Drive y Shame, aprendía tan tarde, perdía cuando acababa de ganar y se desangraba, sirve para hacer llorar a otros, para que lo que se desmorona esté, por una vez, fuera de ella, mirándola, sin poder ganar, asistiendo al inesperado triunfo de su lentitud. 

1 comentario:

A.Pérez dijo...

que lindo. sólo la vi en drive como sabes, pero me pareció que interpreto muy bien su personaje. tendré que ver las otras también.