29 enero 2006
vida. formatos
Un artículo en el dominical de El País 22.1 acerca del pastoreo: dos adultos de 76 y 74 años, hermanos, que se definen como mozos viejos. Se ha quedado desvalijado el pueblo –dicen- Nadie nos ha llamado la atención nunca, nadie nunca jamás. Hemos vivido muy honradamente. A los padres nunca les dimos disgustos.
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