26 febrero 2008
érrase una vez
En un día en el que ni un sólo medio dejará de contar cuál de los dos candidatos hizo desaparecer al otro, dos obras en que más aparecen en el título de los que una vez dentro: Ocho mortales poseídas –compilación de relatos de Tennessee Williams escritos en la década de los 70- y Siete hombres –compilación de relatos de Max Beerbohm, datados sobre 1920. El primero de los volúmenes contiene no ocho mujeres, sino seis al contar los relatos, y en el segundo, no siete sino seis hombres. Un día como ayer de hace 25 años moría Williams, y en cuanto a Beerbohm, basta el primero de sus cuentos –Enoch Soames- para justificar la inversión. Venden cuentos los vivos y los muertos. A elección.
24 febrero 2008
¿alguien quiere un debate serio?
La historia aparece en la primera página del Times sin drama tipográfico. A dos columnas, a la izquierda, en un recuadro y con un título en cursiva tan elegante como: "Para McCain, la autoconfianza en su ética tiene sus propios riesgos". Por debajo, la firma de los cuatro periodistas que han trabajado en esto desde diciembre. Y después una bomba de relojería que puede estallar en la campaña de McCain o en la sede del periódico en Times Square.
Varios aspectos esenciales de la relación entre la prensa y la política están sobre el tapete en este asunto. Primero, el de la independencia de un diario que ataca despiadadamente a un político para el que pidió hace menos de un mes el voto en un editorial. Segundo, el intento de McCain de violar esa independencia negándose a hablar con los reporteros que se lo pidieron y recurriendo, en cambio, a una llamada telefónica al director del periódico, Bill Keller, quien, por supuesto, no atendió su solicitud. Tercero, los límites del propio periódico.
¿Se puede publicar sin fuentes identificadas una información potencialmente tan letal contra un político? ¿Tan seguros están de su veracidad? ¿Por qué ahora? ¿Por qué no en diciembre cuando, según cuenta el periódico, empezaron la investigación? ¿O en enero, antes de las primarias de New Hampshire, donde McCain ganó y comenzó su ascenso hacia la nominación?
Keller emitió ayer un comunicado en el que afirma que la información llegó a su despacho el martes por la tarde. Le dio el visto bueno y fue editada y sometida a la revisión de los abogados "como se hace rutinariamente". –Antonio Caño, en El País, 22.2
Varios aspectos esenciales de la relación entre la prensa y la política están sobre el tapete en este asunto. Primero, el de la independencia de un diario que ataca despiadadamente a un político para el que pidió hace menos de un mes el voto en un editorial. Segundo, el intento de McCain de violar esa independencia negándose a hablar con los reporteros que se lo pidieron y recurriendo, en cambio, a una llamada telefónica al director del periódico, Bill Keller, quien, por supuesto, no atendió su solicitud. Tercero, los límites del propio periódico.
¿Se puede publicar sin fuentes identificadas una información potencialmente tan letal contra un político? ¿Tan seguros están de su veracidad? ¿Por qué ahora? ¿Por qué no en diciembre cuando, según cuenta el periódico, empezaron la investigación? ¿O en enero, antes de las primarias de New Hampshire, donde McCain ganó y comenzó su ascenso hacia la nominación?
Keller emitió ayer un comunicado en el que afirma que la información llegó a su despacho el martes por la tarde. Le dio el visto bueno y fue editada y sometida a la revisión de los abogados "como se hace rutinariamente". –Antonio Caño, en El País, 22.2
21 febrero 2008
antiguas permutas
En sendas caras de la misma hoja escribían el 4.1 en El País, por un lado Emilio Menéndez del Valle acerca de la crisis en Kenia de estos días que Jomo Kenyatta –el líder keniano que en 1963 arrancó al reino unido la independencia de su país- gustaba de repetir la sentencia “cuando los ingleses llegaron a Kenia, ellos tenían la biblia y nosotros las tierras. Hoy nosotros tenemos la biblia y ellos las tierras". Y justo por detrás, escribe Miguel Ángel Bastenier que "Se dibuja en el mapa un triángulo de la muerte en el que opera el terrorismo internacional, que podemos denominar Yihadistán o la tierra de la yihad en su versión macabra; la de la guerra no sólo contra Occidente, sino, principalmente, las sociedades islámicas de gobernantes moderados, o sea congraciados con EE UU. Ese triángulo, formado por Pakistán, Afganistán e Irak, no delimita una figura geométrica continua, sino que su parte iraquí aparece separada de la afgano-paquistaní por Irán, el gran íncubo de Washington, país en el que, sin embargo, no encuentra refugio el terrorismo islamicista.
Fracasada la Operación Benazir, ese triángulo de la yihad donde el terrorismo practica la propaganda por el hecho para edificación de parte del mundo árabe e islámico, funciona como una estructura de vasos comunicantes. Mientras desciende la violencia en Irak, hasta el punto de que Washington empieza a pensar que puede ganar la guerra, aumenta exponencialmente en Afganistán, y Pakistán mete varios conflictos en una sola carnicería: la guerra de la democracia y la del terror, enemigas entre sí, enfrentadas al poder oficial. Estados Unidos, que ha abierto Irak al terrorismo yihadista; que asiste impotente a la salida de las catacumbas de los talibanes en Afganistán; sigue inerme aferrado a su aliado paquistaní, pese a que ya no puede aliviar con Benazir a un presidente acosado. El tiempo transcurrido desde el 11-S ha servido para consolidar ese nuevo triángulo de la yihad. La guerra contra el terrorismo se extiende, pero hacia Occidente".
Lo primero describe también las permanentes invasiones de la iglesia en tierra de derechos, al punto de que no se sabe muy bien qué sea metáfora de lo otro: si Kenia de esto, o esto de aquello.
Lo segundo describe el asedio que genera asedio, y como a partir de ahí, la postura más intransigente pondrá a quienes no están con ellos en el paredón de los que en contra. La permuta de las razones para odiar por los lugares desde los que poder hacerlo está en ambos artículos: más claro en Kenia y su intercambio de crucifijos y registros de propiedad, y sólo algo más arduo de ver en el caso de la triada de países afectados por el terrorismo islámico: aquí la madera del dios impreso en las lanzas es otra, pero con él se persigue las mismas tierras, el mismo derecho a quedárselas mientras los infelices –que en el rezar se cuentan por millones, ponen a dios con el resto de baratijas.
Fracasada la Operación Benazir, ese triángulo de la yihad donde el terrorismo practica la propaganda por el hecho para edificación de parte del mundo árabe e islámico, funciona como una estructura de vasos comunicantes. Mientras desciende la violencia en Irak, hasta el punto de que Washington empieza a pensar que puede ganar la guerra, aumenta exponencialmente en Afganistán, y Pakistán mete varios conflictos en una sola carnicería: la guerra de la democracia y la del terror, enemigas entre sí, enfrentadas al poder oficial. Estados Unidos, que ha abierto Irak al terrorismo yihadista; que asiste impotente a la salida de las catacumbas de los talibanes en Afganistán; sigue inerme aferrado a su aliado paquistaní, pese a que ya no puede aliviar con Benazir a un presidente acosado. El tiempo transcurrido desde el 11-S ha servido para consolidar ese nuevo triángulo de la yihad. La guerra contra el terrorismo se extiende, pero hacia Occidente".
Lo primero describe también las permanentes invasiones de la iglesia en tierra de derechos, al punto de que no se sabe muy bien qué sea metáfora de lo otro: si Kenia de esto, o esto de aquello.
Lo segundo describe el asedio que genera asedio, y como a partir de ahí, la postura más intransigente pondrá a quienes no están con ellos en el paredón de los que en contra. La permuta de las razones para odiar por los lugares desde los que poder hacerlo está en ambos artículos: más claro en Kenia y su intercambio de crucifijos y registros de propiedad, y sólo algo más arduo de ver en el caso de la triada de países afectados por el terrorismo islámico: aquí la madera del dios impreso en las lanzas es otra, pero con él se persigue las mismas tierras, el mismo derecho a quedárselas mientras los infelices –que en el rezar se cuentan por millones, ponen a dios con el resto de baratijas.
20 febrero 2008
el oráculo
En algún lugar de las oficinas del sector encargado de la estrategia -cabe pensar en una pizarra- hay permanentemente escritas dos frases:
La primera: si el gobierno decide a, entonces se equivoca en b y c.
La segunda: si el gobierno decide b, entonces se equivoca en a y c.
Raramente un problema permite a quien haya de afrontarlo elegir entre hacer una cosa o la contraria, y sin embargo son siempre más de una las razones por las que, haga lo que haga, quien decide yerra. No mienten las vallas electorales que afirman tener las ideas claras. Uno hubiera expuesto además la pizarra: a,b,c. Sin comas también se entiende muy claramente.
La primera: si el gobierno decide a, entonces se equivoca en b y c.
La segunda: si el gobierno decide b, entonces se equivoca en a y c.
Raramente un problema permite a quien haya de afrontarlo elegir entre hacer una cosa o la contraria, y sin embargo son siempre más de una las razones por las que, haga lo que haga, quien decide yerra. No mienten las vallas electorales que afirman tener las ideas claras. Uno hubiera expuesto además la pizarra: a,b,c. Sin comas también se entiende muy claramente.
14 febrero 2008
08 febrero 2008
proyecto 80%
me llega esta dirección y la paso:
http://lasombradeaznar.blogspot.com/
LA SOMBRA DE AZNAR PRESENTA:
¡PROYECTO 80%!
"¿Qué pasaría si consiguiésemos alcanzar una participación en las elecciones generales del 80%?
La izquierda lleva 4 años aletargada, esperando su momento, guardando las distancias en el debate político, mordiéndose la lengua y lo que no es la lengua, respirando hondo, tragando bilis, soportando insultos, recibiendo desprecios, pasiva, retirada, ahogada en un suspiro. Recordemos la decena de manifestaciones de la derecha mediática; las cosas que han voceado; los disparates que se han atrevido a decir; hasta donde han sido capaces de llegar manoseando instituciones sagradas como el Tribunal Constitucional; incluso se han atrevido a jugar con el dolor de las víctimas y con los muertos del 11M. Nosotros, convencidos de nuestro sentido de la responsabilidad cívica, hemos elegido, sea por omisión o por comodidad, no responder ante semejantes andanadas. Apostamos por la política del apaciguamiento y por ceder nuestra espacio en la calle confiados en que las concentraciones se deslegitimasen por sí solas debido a los discursos antidemocráticos que se desarrollaban en cada una de las intervenciones de la derecha social española. 4 años de silencio, 4 años estoicos tolerando lo intolerable.
Pero ha llegado el momento en que los ciudadanos progresistas de este país podemos responder con toda la fuerza merecida a estos 4 años de descrédito y deslealtad democrática por parte de la derecha española, individualizada en abates como Acebes, Zaplana, Alcaraz, Rouco Varela o Jiménez Losantos. Ha llegado el momento de convocar una manifestación colectiva, tan grande y espectacular, que sea capaz de procurar tal lección democrática para aquellos que han violentado nuestra convivencia, que nunca, jamás, la olviden. Es hora, es el momento, de sacar a pasear nuestro orgullo, nuestro corazón, nuestros ideales, con la cabeza bien alta. Pero no lo haremos en la calle en forma de concentración ruidosa con pancarta y sloganes. Lo vamos a plantear desde la red, más allá de la red, aludiendo al sentido de responsabilidad ciudadana que millones de españoles tenemos.
(…)
¿Nos atrevemos? ¿Nos atrevemos? Yo, me atrevo. ¿Quién se apunta?
¡Proyecto 80%!
La Sombra de Aznar convoca a todos los progresistas y os pide que os hagáis eco en vuestras webs, blogs, foros y medios. Servidor pone la semilla. El sol, el abono y el agua es cosa de todos para que esta enorme iniciativa culmine. ¡Orgullo compañeros, orgullo! ¡Proyecto 80%!
PÁSALO."
http://lasombradeaznar.blogspot.com/
LA SOMBRA DE AZNAR PRESENTA:
¡PROYECTO 80%!
"¿Qué pasaría si consiguiésemos alcanzar una participación en las elecciones generales del 80%?
La izquierda lleva 4 años aletargada, esperando su momento, guardando las distancias en el debate político, mordiéndose la lengua y lo que no es la lengua, respirando hondo, tragando bilis, soportando insultos, recibiendo desprecios, pasiva, retirada, ahogada en un suspiro. Recordemos la decena de manifestaciones de la derecha mediática; las cosas que han voceado; los disparates que se han atrevido a decir; hasta donde han sido capaces de llegar manoseando instituciones sagradas como el Tribunal Constitucional; incluso se han atrevido a jugar con el dolor de las víctimas y con los muertos del 11M. Nosotros, convencidos de nuestro sentido de la responsabilidad cívica, hemos elegido, sea por omisión o por comodidad, no responder ante semejantes andanadas. Apostamos por la política del apaciguamiento y por ceder nuestra espacio en la calle confiados en que las concentraciones se deslegitimasen por sí solas debido a los discursos antidemocráticos que se desarrollaban en cada una de las intervenciones de la derecha social española. 4 años de silencio, 4 años estoicos tolerando lo intolerable.
Pero ha llegado el momento en que los ciudadanos progresistas de este país podemos responder con toda la fuerza merecida a estos 4 años de descrédito y deslealtad democrática por parte de la derecha española, individualizada en abates como Acebes, Zaplana, Alcaraz, Rouco Varela o Jiménez Losantos. Ha llegado el momento de convocar una manifestación colectiva, tan grande y espectacular, que sea capaz de procurar tal lección democrática para aquellos que han violentado nuestra convivencia, que nunca, jamás, la olviden. Es hora, es el momento, de sacar a pasear nuestro orgullo, nuestro corazón, nuestros ideales, con la cabeza bien alta. Pero no lo haremos en la calle en forma de concentración ruidosa con pancarta y sloganes. Lo vamos a plantear desde la red, más allá de la red, aludiendo al sentido de responsabilidad ciudadana que millones de españoles tenemos.
(…)
¿Nos atrevemos? ¿Nos atrevemos? Yo, me atrevo. ¿Quién se apunta?
¡Proyecto 80%!
La Sombra de Aznar convoca a todos los progresistas y os pide que os hagáis eco en vuestras webs, blogs, foros y medios. Servidor pone la semilla. El sol, el abono y el agua es cosa de todos para que esta enorme iniciativa culmine. ¡Orgullo compañeros, orgullo! ¡Proyecto 80%!
PÁSALO."
27 enero 2008
tirar porque te tocan
Historia de ¿Kabuki? que en su periplo por el mundo recorre no sé qué parte del sur de estados unidos hasta que un agente de la autoridad le detiene y le lleva hasta la frontera del estado, cuyos límites le impide volver a franquear, pues no puede entender qué lleva a un japonés a recorrer los caminos norteamericanos en bicicleta. Lo cuentan Bernie y Valeria, a los que, por lo mismo, expulsaran del mundo un día de estos.
26 enero 2008
y sin embargo es un hombre honrado
Escribió Skakespeare en Julio César acerca del poder que consiente te dirijas al pueblo si es para dar la razón a quien viene de cometer un crimen. 33 mociones de confianza en 20 meses de gobierno sólo se explican si quien las sortea es un delincuente con suerte, lo que, por lo leído estos días, no parece el caso del recién dimitido Romano Prodi, y si las formas cuentan rápido lo que las íntimas razones desgranan lento, las vistas ayer en el senado del país que diera al mundo las bases del derecho, entre cimientos otros, revelan hasta qué punto el relevo de Prodi se diría debiera salvar el país forzosamente. O eso o es sólo ira, ambición, apetito de poder por encima de las hambres de la sociedad que te votara. Y así 33 veces, hasta que el cántaro es arrojado hacia la fuente con tal ensañamiento que poco importa si ambos se quiebran. Acerca de la mano que arrojaría contra el resto todo menos los dedos que necesita para aferrar los trozos restantes, sugiero leer el espléndido El partido de la familia, de Lluis Bassets, ayer en El País. Acerca de los trozos, la imagen citada por Massimo Giannini hoy en El País: la crisis perfecta que nombrara Giulio Tremonti para describir aquella en que nadie controla nada, de la que nadie sabe cómo salir. Sólo cómo lograr entrar.
25 enero 2008
Lo indecible
Historia de Pastora Mira, colombiana que un día recogió en la calle a un joven de 17 años gravemente herido en una pierna. No le hizo preguntas y se lo llevó a su casa. Le curó, le dejó dormir y le preparó el desayuno. Al abrir los ojos, el joven le preguntó: "¿Qué hacen ahí las fotos de ése que matamos anteayer?". Pastora contestó: "Ésta es su casa, yo soy su madre y la cama en la que duermes es la suya"-hoy en El País.
17 enero 2008
parte de bajas, parte de altas
Como bien ha mostrado el pp al hacer de ello razón de desestado durante los últimos cuatro años, a veces pudiera importar más la forma en que se pierde que quienes insospechadamente ganan. Escribe Soledad gallego-Díaz en El País 13.1 que el problema de basar una campaña electoral en la denuncia de una catástrofe es que no se puede colocar a los ciudadanos ante una desgracia de ese tipo sin presentar al mismo tiempo la solución para evitarla. Es a estas horas que en elpais.com puede leerse a gallardón declararse derrotado tras haber sido apartado de la lista al congreso por Madrid. Obviando que, asumiendo el juego al que se juega, quien debería comparecer y llevarse los titulares es aguirre, ha de saber rajoy que en esto el que gana hoy ha de perder mañana, si no antes. Y si el riesgo compensa ha de ser porque si algo es cierto es que quien pierde hoy raramente ganará mañana, al menos en el mismo bando. A diferencia de la decisión que apartó a Rato, sorprende hacer tan claramente perdedor hoy a quien, a diferencia de aquel, sí porta consigo –es suya, se diría- parte no imitable del respaldo de cierta cuota de voto no necesariamente de derechas. Nada perdía aznar claramente, en posesión de mayoría absoluta, al escoger a un tipo sólido como rajoy como sucesor, más otra cosa –ay!- es gestionar y aplicar la solidez en las buenas que a las malas, y en esto sucede –se demuestra- que rajoy, junto al dedo que lo nombrara, heredó el resto del corpus ideológico, sin que esto suponga adjudicar a aguirre el mínimo reproche acerca de sus legítimas aspiraciones.
En cierto sentido, ha de verse como un síntoma de salud democrática que un partido se rija por criterios no presidencialistas, y que en las decisiones importantes pese el grueso de quienes dirigen el partido y no sólo el elegido como portavoz. Buenas o fallidas, aznar, como Solbes, gonzález antes que ambos, o fraga antes que todo, son excepciones en esto, pero ejemplos cercanos hay más y no lejanos: la propia conferencia episcopal gestiona –manifiesta- sus prioridades por aparente mayoría de opinión a favor de lo demostrado, sin que en ello pese un ápice el parecer de su elegido mandatario principal, al menos, en sus declaraciones, contrario a la exhuberancia reciente de los llamados ataques a la defensiva de los que el ente viene. Podrá gustar más o menos el rumbo con que se dirigen las naves populares y las del catolicismo –son ejemplos, no estoy diciendo que sean lo mismo o que caminen al unísono, aunque sus remos se toquen en según qué mares- pero sus decisiones no mienten un ápice: son lo que hay, y para desdicha de gallardón entre otros, también lo que no hay.
Si suena a injusto o errado se debe, en no poca parte, a lo que escribe Joaquín Estefanía acerca del marketing de crisis económica en El País, 13.1, pero que sirve para explicar más cosas: la percepción se distancia de la realidad por una conjunción de circunstancias como ser afectado directo del empeoramiento. Así, paradójicamente, las decisiones qua atañen al rumbo global de una estructura suenan a veces tan dramáticas –la de hoy, por ejemplo- porque se observan desde fuera de quienes forman esa estructura. El desdén hacia gallardón ha de sonar hoy a desastre a quienes lo observan desde posiciones de izquierda, y eso es lo mejor que puede pasarle a la estructura que viene de posicionarse en contra, pues si eso tiene consecuencias –idus de marzo- habrá de afectar a los que queden, como asimismo sería de esperar si hubiera elecciones en ese sistema político propio e incompartible que es, como toda religión, el catolicismo. Fraga declara que la decisión de rajoy hará perder muchos votos, y que esa sea la grieta real no quiere decir que no sea una paralela, como si la sombra caminara a otro paso que el cuerpo pero sus tropiezos lo fueran de los dos, pues, contrario a lo que pudiera pensarse, sólo relativamente pesa el parecer del cuerpo de fieles y sí el de los sanedrines que viven dentro, en esa suerte de cavernas tan típicas de lo político, a las que no llega la relación que el exterior tiene con las sombras. El pp viene de hacer lo que debía para seguir siendo el pp, pero gallardón tiene esa opción también. Y, raro como suene, a veces quien pierde el primero pierde mejor.
En cierto sentido, ha de verse como un síntoma de salud democrática que un partido se rija por criterios no presidencialistas, y que en las decisiones importantes pese el grueso de quienes dirigen el partido y no sólo el elegido como portavoz. Buenas o fallidas, aznar, como Solbes, gonzález antes que ambos, o fraga antes que todo, son excepciones en esto, pero ejemplos cercanos hay más y no lejanos: la propia conferencia episcopal gestiona –manifiesta- sus prioridades por aparente mayoría de opinión a favor de lo demostrado, sin que en ello pese un ápice el parecer de su elegido mandatario principal, al menos, en sus declaraciones, contrario a la exhuberancia reciente de los llamados ataques a la defensiva de los que el ente viene. Podrá gustar más o menos el rumbo con que se dirigen las naves populares y las del catolicismo –son ejemplos, no estoy diciendo que sean lo mismo o que caminen al unísono, aunque sus remos se toquen en según qué mares- pero sus decisiones no mienten un ápice: son lo que hay, y para desdicha de gallardón entre otros, también lo que no hay.
Si suena a injusto o errado se debe, en no poca parte, a lo que escribe Joaquín Estefanía acerca del marketing de crisis económica en El País, 13.1, pero que sirve para explicar más cosas: la percepción se distancia de la realidad por una conjunción de circunstancias como ser afectado directo del empeoramiento. Así, paradójicamente, las decisiones qua atañen al rumbo global de una estructura suenan a veces tan dramáticas –la de hoy, por ejemplo- porque se observan desde fuera de quienes forman esa estructura. El desdén hacia gallardón ha de sonar hoy a desastre a quienes lo observan desde posiciones de izquierda, y eso es lo mejor que puede pasarle a la estructura que viene de posicionarse en contra, pues si eso tiene consecuencias –idus de marzo- habrá de afectar a los que queden, como asimismo sería de esperar si hubiera elecciones en ese sistema político propio e incompartible que es, como toda religión, el catolicismo. Fraga declara que la decisión de rajoy hará perder muchos votos, y que esa sea la grieta real no quiere decir que no sea una paralela, como si la sombra caminara a otro paso que el cuerpo pero sus tropiezos lo fueran de los dos, pues, contrario a lo que pudiera pensarse, sólo relativamente pesa el parecer del cuerpo de fieles y sí el de los sanedrines que viven dentro, en esa suerte de cavernas tan típicas de lo político, a las que no llega la relación que el exterior tiene con las sombras. El pp viene de hacer lo que debía para seguir siendo el pp, pero gallardón tiene esa opción también. Y, raro como suene, a veces quien pierde el primero pierde mejor.
12 enero 2008
Ángel González
ME BASTA ASÍ
Si yo fuera Dios
y tuviese el secreto,
haría
un ser exacto a ti;
lo probaría
(a la manera de los panaderos
cuando prueban el pan, es decir:
con la boca),
y si ese sabor fuese
igual al tuyo, o sea
tu mismo olor, y tu manera
de sonreír,
y de guardar silencio,
y de estrechar mi mano estrictamente,
y de besarnos sin hacernos daño
-de esto sí estoy seguro: pongo
tanta atención cuando te beso;
entonces,
si yo fuese Dios,
podría repetirte y repetirte,
siempre la misma y siempre diferente,
sin cansarme jamás del juego idéntico,
sin desdeñar tampoco la que fuiste
por la que ibas a ser dentro de nada;
ya no sé si me explico, pero quiero
aclarar que si yo fuese
Dios, haría
lo posible por ser Ángel González
para quererte tal como te quiero,
para aguardar con calma
a que te crees tú misma cada día,
a que sorprendas todas las mañanas
la luz recién nacida con tu propia
luz, y corras
la cortina impalpable que separa
el sueño de la vida,
resucitándome con tu palabra,
Lázaro alegre,
yo,
mojado todavía
de sombras y pereza,
sorprendido y absorto
en la contemplación de todo aquello
que, en unión de mí mismo,
recuperas y salvas, mueves, dejas
abandonado cuando -luego- callas...
(Escucho tu silencio.
Oigo
constelaciones: existes.
Creo en ti.
Eres.
Me basta).
Si yo fuera Dios
y tuviese el secreto,
haría
un ser exacto a ti;
lo probaría
(a la manera de los panaderos
cuando prueban el pan, es decir:
con la boca),
y si ese sabor fuese
igual al tuyo, o sea
tu mismo olor, y tu manera
de sonreír,
y de guardar silencio,
y de estrechar mi mano estrictamente,
y de besarnos sin hacernos daño
-de esto sí estoy seguro: pongo
tanta atención cuando te beso;
entonces,
si yo fuese Dios,
podría repetirte y repetirte,
siempre la misma y siempre diferente,
sin cansarme jamás del juego idéntico,
sin desdeñar tampoco la que fuiste
por la que ibas a ser dentro de nada;
ya no sé si me explico, pero quiero
aclarar que si yo fuese
Dios, haría
lo posible por ser Ángel González
para quererte tal como te quiero,
para aguardar con calma
a que te crees tú misma cada día,
a que sorprendas todas las mañanas
la luz recién nacida con tu propia
luz, y corras
la cortina impalpable que separa
el sueño de la vida,
resucitándome con tu palabra,
Lázaro alegre,
yo,
mojado todavía
de sombras y pereza,
sorprendido y absorto
en la contemplación de todo aquello
que, en unión de mí mismo,
recuperas y salvas, mueves, dejas
abandonado cuando -luego- callas...
(Escucho tu silencio.
Oigo
constelaciones: existes.
Creo en ti.
Eres.
Me basta).
08 enero 2008
diario de la mujer del césar, 2
Iba uno a escribir acerca de las rebajas que empezaron hoy y las que llevan meses prometiendo unos y otros a vueltas con la presión fiscal, acerca de ese común Nos devuelven el dinero, que en el segundo caso viene a demostrar que no quedamos satisfechos y por eso. El caso es que uno cumple ya una semana devolviendo un euro diario a abc y ya faltan armarios para tanto desvarío. No puedo quejarme de lo que hacen con mi dinero, pues, leyendo la columna de pablo sebastián hoy, se maravilla uno de la cordura que puede comprarse, aunque siete días de lectura den ya para la sospecha de que en realidad es uno solo el que lo escribe entero, las setenta páginas del periódico. Cortados –a pelo- por un patrón idéntico, avanzan sus titulares cierta variedad de ángulos del mismo tema –la inepcia gubernamental en sus diversas posibilidades- que luego su lectura despeja en tres líneas para recitar el corpus del desastre. Por referencias duele Sebastián, no por su ideología –que allá cada cual mientras no haga de su inteligencia un saco roto- sino por lo que el desvarío siembra de absurdo en su discurso. Así, viene de mentar el desgaste del gobierno cuando clama el “atreverse a reclamar el socialismo los éxitos económicos como propios”. ¿De quién son, sino? Escribe hoy Estefanía en El País que ni uno sólo de los datos macroeconómicos del anterior gobierno ha quedado sin mejorar. Si la desdicha actual inflacionaria es responsabilidad exclusiva del gobierno –y lo es, por supuesto- entonces ¿no ha de serlo también lo logrado en los cuatro años previos a esto? No es ideología, sino sentido común. Escribe Sebastián después que del pacto con erc nació la metástasis institucional –probable-, la ruptura confederal del modelo autonómico –probable-, la negociación con eta -????- y los ataques a la corona -??????-. ¿Estima Sebastián como prueba de la voluntad gubernamental de negociar con eta aquel desvario –uno más- de carod al presentarse en solitario ante eta con aquella propuesta tan típica de su lucidez? ¿es la coalición con erc la responsable de negociar con eta? No, claro que no. Sólo un idiota pensaría eso. Otra cosa es que se decida que la razón verdadera del malestar –la negociación en sí, haberla intentado- bien puede juntarse a la hora de denunciar el desastre con aquella estupidez que tratara carod. Total, si quien nos lee espera que lo escribamos todo, qué puede importar hacerlo en la misma frase, sujeto uno, predicado otro. El procedimiento sirve también para explicar lo de los ataques a la corona. Aquí Sebastián escribe la mezcla de la postura republicana y nacionalista de erc con el hecho de que el rey sea, desde lo de chávez, árbol rentable al que arrimarse, amén de automatismo en ese periódico, claro. Más: junto a la “consabida fractura de la convivencia nacional”, embosca la Ley de la memoria histórica en un “regreso a los debates de la guerra civil”, tal vez ignorando que la ley pretende corregir los tiempos en que la judicatura franquista mandaba la gente a morir fusilada sin mayor “debate”. Vuelve a erc para decir que su presencia en el tripartito “ha sido el motor de explosión de los pactos de la transición y de la unidad contra eta”. Las subvenciones por alquiler para jóvenes son cebo para “un suculento cuerpo electoral” –no como las promesas de rebaja fiscal que rajoy va a pasear por españa de aquí a marzo, o eso que ya anuncia en vallas de “llegar a fin de mes”. Como corolario “los electores ya saben, o debieran saber, quién de los dos candidatos puede empeorar la situación”. Dirigía Sebastián en 1992 un periódico al que pusieron de nombre El independiente, y en aquellos tiempos uno acababa de entrar a trabajar en la agencia de publicidad que venía de hacer la campaña de lanzamiento del periódico. En el anuncio, un hombre restallaba oratoria delante de un micrófono, en un escenario clásico de un mitin. La cámara le mostraba desde el punto de vista de quien escuchaba y poco a poco iba girando con él en el centro, hasta ubicarse justo detrás, entonces veíamos al hombre que, asomado al escenario a través de una pequeña obertura en el suelo, tenía en los teatros antiguos la función de repetir el papel por si el actor lo olvidaba, o de ir leyéndolo para que aquel pudiera declamarlo. No escribimos al dictado –decía el anuncio. El símil funciona sólo por aproximación, dado que lo que falla aquí, y a lo largo de todo ese periódico, no es la opción legítima de escoger desde qué lado se habla, sino la desenfocada de ira, rencor o lo que sea, que pasa, en la misma línea, de defender unas ideas a atacar, ofuscados, otras a las que, probablemente, para sobrevivir, les basta no ser lo que les llaman. Lo escribe el Roto hoy: necesitamos fervientes católicos o, en su defecto, fanáticos anticlericales.
06 enero 2008
o conmigo
Nada hay en el artículo de Hermann Tertsch hoy, en la tercera de abc, que pueda ser empleado en la campaña de demolición de gobiernos de otro periódico, pues habla aquel del clásico desdén de cierta izquierda por tildar de similar crimen el comunismo cuando tan cerca tenemos el fascismo para llenar los diccionarios, pero culpa a los otros, y, como es costumbre, permite interpretar a medida del propio antojo sus citas respecto al abuso de la desmemoria y la manipulación del pasado, asi que venga, y qué prueba más clara que darle la tercera cuando el país sólo le presta la catorce.
05 enero 2008
Hallazgos
El primero, JJMillás en su artículo del viernes 4 sobre la última manifestación del nacional catolicismo en la plaza de Colón de Madrid. Dice lo que me hubiera gustado saber decir, pero como ya lo dice él, para qué escribir. Estoy hasta los webos de estos otros talibanes. Mientras ellos hacen campaña electoral, a mí no me dejan abandonar su redil y oficialmente sigo siendo católico. En frente tienen al gobierno de la época democrática que más concesiones ha hecho a una confesión religiosa.
El segundo, la web de Banksy. Otro Roto.
El tercero, un programa: CrossLoop.
La bomba para los que ejercen del típico cuñado que sabe de ordenadores. Yo me entiendo.
A disfrutar...
El segundo, la web de Banksy. Otro Roto.
El tercero, un programa: CrossLoop.
La bomba para los que ejercen del típico cuñado que sabe de ordenadores. Yo me entiendo.
A disfrutar...
Etiquetas:
manifestación,
obispos,
talibanes
04 enero 2008
Precios de la mortadela
Comía día sí, día también, mortadela y pan mi amigo Manzo cuando en Lavapiés, hace tres años. Era la misma precariedad la de la zona, el sueldo, la parte de recién emigrante, una misma escasez que no debía hacer mejor el fiambre pero tampoco más amargo. Cualquier día laborable –qué esa fanfarria lela de “entre semana”- puede verse a decenas de obreros entrar en el carísimo supermercado del centro comercial de arturo soria y allí comprar fiambre, pan y cerveza o refrescos para matar el hambre de mediodía, que seguramente terminan de apuñalar en los jardines que lindan, a apenas unos metros, con el parque conde de orgaz. Nada de lo que desde ellos se vislumbra tiene de mortadela un ápice: colegios, restaurantes, tiendas de muebles, terrazas. Volvió mi buen Manzo a su país, a comer disgustos de otra clase, no mucho más curados, y aquella mortadela se la venden hoy a otros, como también será con el fiambre que estos días pagan a precio de propietario quienes sólo viven en las mansiones de aquí al lado el tiempo que les lleva hacerlas habitables. Hay algo desconectado del entorno en el parque a la hora de comer, y hay que pensar que es la opulencia respecto a quienes la construyen, y no tanto el hambre que se sacia con los ojos mirando hacia un lado y la boca hacia otro. Otra opción es comerse al que tiene un millón de veces más que uno. Seguramente ni se les pasa por la cabeza porque la mayoría vienen de países del este de europa, y allí, durante décadas, vieron llegar al unísono el hambre y las promesas de comerse los bienes de los ricos.
03 enero 2008
diario de la mujer del césar, 1
Abría el sábado abc con un titular bajo –al uso, diríamos- que anuncia que “los españoles rechazan el optimismo económico exhibido por zapatero”. Sigue: “presume de crecimiento y empleo, mientras el CIS refleja una gran preocupación por el paro, la vivienda y la situación económica”. Dentro, un columnista insulta el papelón hecho con eta como prueba de que la economía no puede haber ido bien, o poco importa. Más a la izquierda, y no habiendo índice de superávit moral a que atenerse, otro columnista insulta la tibieza de rajoy por no condenar el matadero de niños –literal- en que ha devenido españa a causa de la ley del aborto. Cita a aquel cuando dice haber justificado la connivencia del pp en ese tema como fruto del consenso, entonces le recrimina falta de ímpetu moral, cita el Apocalipsis, clama un régimen ético nuevo. Más dentro aún, se lee que “pese a la opinión que refleja el CIS, zapatero subrayó que en esta legislatura el crecimiento económico ha sido intenso, se ha creado empleo como en ninguna otra, se ha vivido el periodo más fértil de paz social y se han subido las pensiones mínimas un 30%. Según zapatero, en estos cuatro años la economía ha crecido un 3,7, algo que no ha logrado ningún país desarrollado y las cuentas públicas han registrado superávit todos los ejercicios frente al déficit con que se cerró 2003. Los ciudadanos no coinciden –concluye el editorialista- pues el 31,6% de los españoles juzga la situación económica mala o muy mala. Además, un 32,3% augura que el próximo año será peor”. Concluye que el barómetro deja claro que zapatero ha dilapidado la herencia económica que recibió de aznar –bueno, escribe del gobierno de aznar, y de esta forma quizá lo aclara todo, pues zapatero es, en este periódico, él solo, sin gobierno que le anteceda, y así es difícil.
zapatero es, en la fotografía que acompaña el artículo, la máscara de un bienpensante si escrutado sin recelo, y la de un lelo si con él, aunque en esto su cara sea apenas el reflejo del alma de quienes seleccionan unas imágenes y desechan otras.
Leído una segunda vez el tramo del texto que enumera los logros económicos del gobierno, se advierte que nada tiene que ver lo que presume aquel de lo que echa en cara carecer el CIS.
De semejante cuajo se hace un queso, uno de esos en porciones estadísticas de pesimismo para definir la situación económica. Es una imagen que se pretende valga así, no sólo más que mil palabras –que para eso no hace falta ni periódico-, sino más que esas tantas cifras, pues cómo tomar en serio las macrocifras cuando los adjetivos dicen lo contrario, y si suficientes pronuncian “mala”, callen los números. Es obvio que el quesito está hecho de porcentajes, y que por lo tanto, son sólo números contra números, y que en un país normal 2.462 entrevistas no dan para modificar o restar credibilidad a las cifras anuales que se elaboran a partir de millones de datos, obvio que en esto no se tiene en cuenta lo improductivo que es leer el periódico como lo que es cuando lo compras para que sea lo que uno quiere. Obvio también que nada de lo que enumera zapatero tiene que ver con el futuro, sino con lo que hemos tenido, y que la proyección más negra sobre lo que ha de venir no cambia una décima los incrementos del PIB, del superávit, de la creación de empleo de que se está hablando.
Más a la derecha, el enésimo columnista titula El balance y los errores. De lo primero no hay una sola cifra que ponga en duda el resumen económico, sí mucho de eta, ese quesito negro y apestoso que tanto sirve, al parecer, para los rotos de los trenes que no se juzgan bien, como para los descosidos con que llegan al CIS los libros de cuentas del gobierno.
Tan legítimo es, desde un lado, lucir lo que se pueda como, desde el otro, sacar tantos cadáveres como se sea capaz –literalmente, incluso, tal es el caso-, y sin embargo suena a práctica de matadero (casquería o lomo, todo es carne) el apuntar al cálculo equivocado con eta como gran pifia gubernamental tras haber dedicado inmensos esfuerzos durante los cuatro años de la legislatura en hacer creíble ese otro cálculo de la sospecha que es ver a eta donde los jueces no. Calcúlese el coste de las 2.462 entrevistas que hacen irrelevante la política económica, pues quizá dé para ahorrarse jueces, incluso ministros, ojalá parlamentos enteros, si todo lo que hace falta es poner el CIS a gobernar.
Es a esos ojos que poco importa que el sol que más calienta cree cáncer a su paso, si el paso da para ahorrase la intemperie de la oposición. Al cabo, el sistema no puede fallar pues se basa en lo poco o nada que hace falta aquí saber de un tema o entender sus causas para elevar la voz, ya sea para clamar contra egipto o contra los mares que no se están quietos al cruzarlos.
Nada lo cuenta como la proposición con que se inicia la retahíla de logros, ese “Según zapatero, la economía ha crecido un 3,7…”, que, dado que antecede a información económica contrastada y no a folclorismos de la opinión, suena a la sospecha de ver escrito “Según zapatero, la tierra gira alrededor del sol”.
Uno distingue dos claves de la mentira ubicua: una es la imposible concesión de tener que admitir que el otro acierta, que la incapacidad absoluta del contrincante es sólo relativa, y ese un miedo a la verdad simple que quizá venga, no tanto de las filas contrarias, sino de las propias, de quienes llevan dentro Apocalipsis suficientes como para temerles por igual en las duras y las maduras, aquello de criar profetas sin preocuparse por los propios ojos.
La segunda explicación posible es el formato -socialmente extendido hasta la asfixia- en que son los micrófonos los que legitiman la opinión, como si la mera atención fuera la osamenta de lo que se dice. Cualquier partido en la oposición ata su destino, o al menos el de sus quejas, a esto, pues nada como proferir la indignación individual para socavar las pruebas globales, aunque se den en planos incomparables. Toca a abc citar el CIS como mañana será el país quien lo haga, y si con ello volvemos más y más frágil el entramado de respetos y asunciones que debiera ser una democracia a salvo de mercenarios de la falsa razón importa poco puesto que nadie ha de venir a demostrarnos lo que echar de menos. En cualquier caso es todo un asunto de mimetismo y correspondencias, pues si las religiones actúan como partidos políticos, por qué no ha de manejar un partido las irrefutables pruebas de que viven aquellas. Como si soldado y víctima de ambas, el CIS ni da ni quita, sólo ayuda a su señor de turno.
zapatero es, en la fotografía que acompaña el artículo, la máscara de un bienpensante si escrutado sin recelo, y la de un lelo si con él, aunque en esto su cara sea apenas el reflejo del alma de quienes seleccionan unas imágenes y desechan otras.
Leído una segunda vez el tramo del texto que enumera los logros económicos del gobierno, se advierte que nada tiene que ver lo que presume aquel de lo que echa en cara carecer el CIS.
De semejante cuajo se hace un queso, uno de esos en porciones estadísticas de pesimismo para definir la situación económica. Es una imagen que se pretende valga así, no sólo más que mil palabras –que para eso no hace falta ni periódico-, sino más que esas tantas cifras, pues cómo tomar en serio las macrocifras cuando los adjetivos dicen lo contrario, y si suficientes pronuncian “mala”, callen los números. Es obvio que el quesito está hecho de porcentajes, y que por lo tanto, son sólo números contra números, y que en un país normal 2.462 entrevistas no dan para modificar o restar credibilidad a las cifras anuales que se elaboran a partir de millones de datos, obvio que en esto no se tiene en cuenta lo improductivo que es leer el periódico como lo que es cuando lo compras para que sea lo que uno quiere. Obvio también que nada de lo que enumera zapatero tiene que ver con el futuro, sino con lo que hemos tenido, y que la proyección más negra sobre lo que ha de venir no cambia una décima los incrementos del PIB, del superávit, de la creación de empleo de que se está hablando.
Más a la derecha, el enésimo columnista titula El balance y los errores. De lo primero no hay una sola cifra que ponga en duda el resumen económico, sí mucho de eta, ese quesito negro y apestoso que tanto sirve, al parecer, para los rotos de los trenes que no se juzgan bien, como para los descosidos con que llegan al CIS los libros de cuentas del gobierno.
Tan legítimo es, desde un lado, lucir lo que se pueda como, desde el otro, sacar tantos cadáveres como se sea capaz –literalmente, incluso, tal es el caso-, y sin embargo suena a práctica de matadero (casquería o lomo, todo es carne) el apuntar al cálculo equivocado con eta como gran pifia gubernamental tras haber dedicado inmensos esfuerzos durante los cuatro años de la legislatura en hacer creíble ese otro cálculo de la sospecha que es ver a eta donde los jueces no. Calcúlese el coste de las 2.462 entrevistas que hacen irrelevante la política económica, pues quizá dé para ahorrarse jueces, incluso ministros, ojalá parlamentos enteros, si todo lo que hace falta es poner el CIS a gobernar.
Es a esos ojos que poco importa que el sol que más calienta cree cáncer a su paso, si el paso da para ahorrase la intemperie de la oposición. Al cabo, el sistema no puede fallar pues se basa en lo poco o nada que hace falta aquí saber de un tema o entender sus causas para elevar la voz, ya sea para clamar contra egipto o contra los mares que no se están quietos al cruzarlos.
Nada lo cuenta como la proposición con que se inicia la retahíla de logros, ese “Según zapatero, la economía ha crecido un 3,7…”, que, dado que antecede a información económica contrastada y no a folclorismos de la opinión, suena a la sospecha de ver escrito “Según zapatero, la tierra gira alrededor del sol”.
Uno distingue dos claves de la mentira ubicua: una es la imposible concesión de tener que admitir que el otro acierta, que la incapacidad absoluta del contrincante es sólo relativa, y ese un miedo a la verdad simple que quizá venga, no tanto de las filas contrarias, sino de las propias, de quienes llevan dentro Apocalipsis suficientes como para temerles por igual en las duras y las maduras, aquello de criar profetas sin preocuparse por los propios ojos.
La segunda explicación posible es el formato -socialmente extendido hasta la asfixia- en que son los micrófonos los que legitiman la opinión, como si la mera atención fuera la osamenta de lo que se dice. Cualquier partido en la oposición ata su destino, o al menos el de sus quejas, a esto, pues nada como proferir la indignación individual para socavar las pruebas globales, aunque se den en planos incomparables. Toca a abc citar el CIS como mañana será el país quien lo haga, y si con ello volvemos más y más frágil el entramado de respetos y asunciones que debiera ser una democracia a salvo de mercenarios de la falsa razón importa poco puesto que nadie ha de venir a demostrarnos lo que echar de menos. En cualquier caso es todo un asunto de mimetismo y correspondencias, pues si las religiones actúan como partidos políticos, por qué no ha de manejar un partido las irrefutables pruebas de que viven aquellas. Como si soldado y víctima de ambas, el CIS ni da ni quita, sólo ayuda a su señor de turno.
31 diciembre 2007
irse o no irse
Del año que se va, lo que se oye en To be or not to be, de Lubitsch, cuando un marido descubre la infidelidad de su mujer al tiempo que ha de partir para el frente: te perdono, pero si vuelvo ya hablaremos.
28 diciembre 2007
fuimos, seremos, sois
El editorial acentuado –sarcástico, ácido, tan ese tono de los gratuitos- con que amaneció El País tras su último rediseño imprimía el 23.12 una glosa de ignacio astarloa, a sueldo del pp como responsable actual de libertades públicas- en la que se recuerdan sus declaraciones recientes –pura liberación pública la de decir lo primero que se nos viene a la libertad- al unir la agresión a cierto personaje de la televisión con la política antiterrorista del gobierno. Y suena este acento a losa debida sobre esa impunidad de la memoria breve, encima de esa versión de la identidad que es camuflarla en la más fugaz de la identificación, tan opinable siempre. No es este astarloa peor que otros en el hábito de juzgarse a partir de lo que hará mañana en lugar de fundar nada en lo que viene de hacer o decir. Estuvieran las calles embadurnadas de periódicos antiguos y uno está convencido de que la realidad resbalaría por sobre ellos sin que el más mínimo pudor asomara al verse insultados por esa pestilencia que deja el defender, a cada poco, ideas incompatibles entre sí, pero cuánta tinta malgastada, cuanta energía la de recopilar, difundir, asquear los oídos con el juego de la indignación permanente, aunque contradiga la de ayer, la de mañana, la de ese tiempo suspendido –y con un cero- de la mera cordura. Por invencible, el desaliento de ver los altavoces a sueldo de la estupidez, los medios a disposición del relato pueril, necio, preinteligente de tantos y tan votados, pues, como han de saber los sordos, nada miente más el deterioro de los propios sentidos como la costumbre de no salir del ruido.
24 diciembre 2007
navidad, un cuento
Refiere nacho haber leído el relato de F., cazador conocido suyo, que en un viaje a Hungría y habiendo negociado la obligatoriedad de vislumbrar pieza, hallándose en un puesto, por tres veces fue advertido por el ojeador acerca de un cervatillo que aparecía y desaparecía, siempre en el mismo sitio del bosque. Escamado y sin haber podido disparar un solo tiro, F. echó a correr hacia el lugar de la epifanía y allí halló a un hombre que, de rodillas, movía y desmovía un ciervo congelado.
22 diciembre 2007
deontologicus rex
Refiere El País hoy viernes de la publicación de un informe editado por el colegio de periodistas de cataluña en el que se afirma que la teoría de la conspiración ha socavado la profesión, la deontología periodística. En una de las páginas vecinas, se lee acerca de los problemas de renfe en cataluña estos días algo así como que la construcción de las líneas ferroviarias avanza mucho más lenta que los trenes que después los recorren. Y posiblemente las dos noticias hablan de los mismo: una vez lanzados, la propia velocidad hace irrelevante la observación, el juicio o simplemente la memoria de lo que hubo de hacer, o deshacer, para llegar a donde se está. Como en aquel aserto de Churchill, el periodismo es, en la medida en que puede, la continuación de las guerras por otros medios, y a qué repensar si el verbo lanzar sirve a las bombas como a los ejemplares que salen de la rotativa. Dentro o fuera del periodismo, la deontología es generalmente un fósil en manos de los reptiles, y como éstos, el sol que más calienta es el que les permite comer. Como sucede con las iglesias, esparcir las heces de la duda es la primera norma si quieres aspirar a que alguien las considere viables, porque conlleva reconocer como sacerdote a quien las erige. Es generosamente elegante tildar de bastardos los intereses que mueven a la cope, el mundo o telemadrid a ensuciar de mentira las chiqueras en que han de salir a alimentarse y alimentar a los demás. Es sólo contabilidad, balances, ejes de ordenadas y abcisas. Las mismas con que la iglesia hace sus cruces. Al respecto, impagable el artículo de Millás, también hoy.